
12 Feb I Coloquio Gótico Nacional
Para ilustrar las implicaciones subversivas del estilo, ese estilo entendido para Dick Hebdige, como: “forma de rechazo, el delito elevado a forma de arte” (aunque aquí los “delitos” se limitan a una mera infracción de códigos); es pertinente enunciar y evocar experiencias de la cotidianidad que invocan conceptos como transgresión y oposición. Acontecimientos que en el contexto geográfico occidental, y en la temporalidad de los 60´s desde el Reino Unido, ejercieran su influencia sobre las jóvenes colectividades que empezaban a radicalizar su postura frente a la desazón que les había producido los dos principales conflictos humanos: “Las guerras mundiales”; pandillas de muchachos que manifestaban su desencuentro con las políticas doble-moralistas promulgadas por estamentos asépticos e intocables. Luego, estas y otras posturas contestatarias se irán multiplicando exponencialmente, tanto en número como en diversidad representacional e ideológica (teddy boys, mods, rockers, skinheads y punks) y se expandirán posteriormente hasta los 80´s en los demás países europeos, teniendo su reflejo en América y su consecuente inmersión colonialista en la cultura de las sociedades de América Latina, configurándose como particulares micro-sociedades urbanas conocidas como “subculturas”.